miércoles, febrero 08, 2006

Al final... siempre salgo perdiendo


He perdido otro cd.
"Popemas". Puede estar en la caja de los Doors que a su vez estará en la caja de Pauline que compartirá funda con los Rakes y los Red Hot apelotonados desde mi último último-viaje. (Es una pena que desde hace unas semanas mis viajes se limiten al metro, la biblioteca y la escuela)

El viernes perdí el abono, el cual había recuperado ese mismo día desde que lo extravié un mes antes, la misma tarde que al sacar las cosas de mi bolso de "mujer caracol" me "sustrajeron" la cartera de mi lado, a la vez que reaccionaba ante la pérdida de mi bufanda. (!!!) Por si interesa el apunte la cartera apareció sin dinero. El abono este sábado estaba en SOL. ¿Y como llegó hasta allí? mejor sería preguntar si no hay nada mejor que hacer una tarde de sábado que seguir el rastro de ese billetito por toda la línea de metro.

Ya son muchas las cosas que he perdido... Tengo miedo a perder la cabeza algún día también. Esto de jugar con la herramienta de tus sentimientos para encontrar lo que mueve a un personaje es muy duro, sobre todo cuando tienes que buscar el conflicto en tí mismo.

...Dicen que los que escribimos somos también un poco actores y plasmamos nuestras personas en los protagonistas de las historias que se nos pasan por la mente... Ahora escribo en 'primera persona'.

¡Qué fácil es encasillarse en un papel tan parecido a tí mismo! Y si no que se lo pregunten a Hugh Grant!!!

(pero que bien lo hace... o se lo haríamos tantas y tantas y tantas mujeres)


¡No! ¡No Quiero Perder! ¡No! ¡No Quiero Mirar! ¡Rosita, me asusta la realidad! ¡Cubrámonos con felpa y tapémonos los ojos! Quizá así podamos vivir por encima del bien y del mal; de este mundo y su complejidad.

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